En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información aquí

¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Buena vida

El placer de viajar en solitario

IMAGEN-16884952-2

IMAGEN-16884952-2

Foto:

Nadie como Anthony Bourdain ha revelado lo placentero que puede ser un viaje en solitario. Y aunque parece una locura –pues siempre se piensan las vacaciones con los amigos o con la familia–, la idea de no negociar planes, manejar un horario propio y conocer gente nueva es algo que hay que vivir por lo menos una vez en la vida.
Por eso fui un fin de semana a la costa atlántica, entre los departamentos de Magdalena y la Guajira, a encontrar lo que no se me había perdido. Primero visité Santa Marta, donde las calles estaban paralizadas por los desfiles de las Fiestas del Mar. El carro no pudo pasar y por eso, arrastrando mi maleta entre la multitud, llegué hasta el hotel Boutique Don Pepe. La gente me decía que cerca estaba la casa de Carlos Vives, pero de lo que me di cuenta es de que a un minuto a pie estaba el Centro Cultural San Juan. Aunque a un par de cuadras se vivían las más alegres fiestas del centro de la ciudad, decidí quedarme en el hotel para comer el mejor cayeye que haya probado –un plato típico a base de plátano verde, queso costeño y un guiso parecido al hogao– y a sobrevivir al calor sofocante de esa noche.
Al día siguiente me fui al parque Tayrona. Fueron 45 minutos de viaje hasta un lugar donde el clima seguía persiguiéndome: 28 grados y una sensación térmica que parecía de 36. Llegué al nuevo hotel Villa María Tayrona, un sitio de desconexión donde no hay wifi ni televisión. Las habitaciones quedan en las copas de los árboles y hay una con visión de 360 grados que deja ver amaneceres que parecen de otro mundo. Tiene piscina, la playa queda cerca y hay actividades de senderismo.
Luego seguí hasta Palomino. Mi última parada fue la Reserva One Love, un lugar con un aire artístico, bohemio y un tanto hippie, donde no dejé de hablar con extranjeros que buscaban aventuras en Colombia. Hice tubing en el río –dejarse llevar por la corriente encima de una llanta–, y conocí a varios lugareños que me recomendaron sitios ideales para tomar fotos.
Un último consejo para el viaje en solitario: lleve equipaje liviano –es usted contra el mundo–, incluya un libro, una cámara de fotos, varios cargadores portátiles y averigüe desde antes qué quiere visitar. El miedo de encontrarse con lo desconocido, ese sí déjelo en la casa.
DONJUAN hizo este recorrido por invitación de Booking.com
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO